Hoy hablaremos del hemangiosarcoma; un tumor maligno del endotelio vascular, muy agresivo y con alto potencial metastásico, que se traduce en un mal pronóstico aún cuando se realice un tratamiento completo.
Generalmente se da en perros machos, de edad avanzada y en razas de tamaño medio-grande.
Aunque tiene múltiples localizaciones, nos centraremos en la mas habitual; el bazo, ya que es motivo frecuente de urgencia al ocasionar un colapso agudo por hemorragia, secundario a la rotura de la masa esplénica, que da lugar a un shock hipovolémico.
En otros casos, pueden verse episodios intermitentes con posterior recuperación o signos inespecíficos como debilidad, pérdida de peso, intolerancia al ejercicio o anorexia.
En la exploración física podemos encontrar distensión abdominal, arritmias, mucosas pálidas, con retraso del tiempo de relleno capilar, pulso alterado y signos hemorrágicos en caso de CID (coagulación intravascular diseminada).

En la analítica sanguínea son hallazgos frecuentes la anemia, leucocitosis con neutrofilia, trombocitopenia o alteraciones en las pruebas de coagulación.
La ecografía es esencial para detectar la masa a nivel esplénico, la presencia de homarragia interna (hemoabdomen) y posibles metástasis en otros órganos.
Ecográficamente se observan como lesiones cavitadas, hipoecogénicas o de ecogenicidad mixta, aunque esta técnica no permite el diagnóstico definitivo pues la imagen es muy similar a la que encontramos en otras lesiones esplénicas benignas como hematomas o hemangiomas.
Igualmente será necesario realizar ecocardiografía para descartar lesiones en aurícula derecha y derrame pericárdico y radiografía de tórax en tres proyecciones para descartar metástasis.
El diagnóstico definitivo se consigue mediante histopatología tras biopsia escisional, es decir, tras realizar la esplenectomía, que en los casos de hemorragia aguda constituye una urgencia quirúrgica.

La citología no suele ser diagnóstica y supone un riesgo innecesario de sangrado en masas esplénicas.
Tras la cirugía, si se confirma el diagnóstico de hemangiosarcoma, se recomienda realizar quimioterapia siendo la doxurrubicina el fármaco de elección solo o en combinación con otros, pudiéndo continuarse con terapia metronómica. Aún con todo, el pronóstico es por lo general muy malo, con tiempos de supervivencias cortos.