“Mi perro tiene un bulto en la pata” “Mi perro sacude mucho la cabeza” “Mi perro ha empezado a estornudar mucho después de salir al campo”...

¿QUÉ SON LAS ESPIGAS?

Las espigas son vainas que recubren semillas de muy diversas plantas gramíneas. Su peculiaridad es que tienen forma de flecha, con una punta afilada en el vértice y su textura es áspera con la capacidad de adherirse a casi cualquier superficie, como el pelo del perro, y clavarse en cualquier material blando, como la piel o mucosas del perro.

Las espigas se reconocen fácilmente, ya que son verdes al principio, en estos momentos no suelen causar problemas ya que están “tiernas”, “frescas”. Cuando han madurado lo suficiente (primavera), se tornan a un color marrón claro/amarillo y se secan, produciendo ahora sí, problemas en nuestras mascotas. Normalmente aparecen durante la época de primavera y, perduran prácticamente todo el verano.



LOS PELIGROS DE LAS ESPIGAS

Las espigas se adhieren al pelo de nuestras mascotas y se clavan en su piel, esto puede derivar en graves problemas como nudos, heridas y penetraciones en la piel, abscesos, dolor, etc.

DERMATITIS:

Las espigas se enganchan al pelo de los perros, si no se quita en su higiene diaria o al cepillarle, se formará un nudo de pelo que provocará falta de transpiración en la piel. Esto llevará a que el perro comience a lamerse intentando eliminar la molesta sensación de picor y se cree una dermatitis.
¿Cómo prevenirlo?

HERIDAS:

La punta de las espigas es muy afilada y se clava con gran facilidad en la piel de nuestras mascotas. Son especialmente frecuentes estas lesiones en las patas del perro, que pisan sobre las espigas clavándose éstas entre los dedos y las almohadillas produciéndose un bulto. Si éste no es localizado y tratado a tiempo, puede formarse una infección.

¿Cómo prevenirlo?

Revisar las patas de nuestro perro después de cada paseo, incidiendo entre los dedos y las almohadillas. Estar atento a posibles lamidos o zonas húmedas que indiquen que se está lamiendo.

OTITIS

Si una espiga se introduce dentro de las orejas de nuestro perro puede provocar una herida interna que conlleve a una infección de oído (otitis). También el que entre una espiga o cuerpo extraño en el conducto auditivo, puede producir perforación del tímpano con consecuente dolor e infección interna, mucho más peligrosa y dolorosa para el animal.
¿Cómo prevenirlo?
Revisar las orejas del perro después de cada paseo y estar atentos a cualquier signo de molestia, ya sea agitación excesiva de la cabeza, ladeo de ésta hacia un lado, rascado excesivo, mal olor y secreción, etc.

ESTORNUDOS CONTÍNUOS O DIFICULTAD RESPIRATORIA

Si nuestro perro ha aspirado una espiga, le notaremos nervioso, moqueando y estornudando continuamente. Puede ocurrir incluso que haya un sangrado continuo o intermitente por la nariz.

Si no se lleva al veterinario a tiempo para solucionar el problema quitando la espiga, hay riesgo de aspiración pudiendo provocar migraciones de ésta por el organismo, con consecuentes problemas a nivel pulmonar, como rotura de alvéolos, dificultad respiratoria, abscesos o infecciones a nivel pulmonar, etc.
¿Cómo prevenirlo?
La forma de prevenir este grave problema es evitar llevarle a zonas de espigas durante la época en las que aparecen (primavera-verano).

ÚLCERAS OCULARES

Al igual que una espiga se puede clavar o introducir en los sitios ya mencionados, también puede clavarse en el ojo.

¿Qué notaremos en el perro?. Notaremos nerviosismo, intento de rascado a toda costa, lagrimeo excesivo, blefaroespasmo (cierre del ojo), tercer párpado muy visible, hinchazón de la zona, etc.
¿Cómo prevenirlo?
Como en los anteriores casos, hay que evitar zonas de espigas y, además, quitar en seguida cualquier espiga que veamos en la cara o cabeza a nuestro perro. En el caso de que ya veamos que está o dentro del ojo o clavada, debemos acudir de inmediato al veterinario para que la extraiga con cuidado, ya que es una zona muy delicada.

En resumen, cuando salgáis de paseo con vuestras mascotas, ya sea en época de espigas o no, hay que revisar bien todo el cuerpo del animal, insistiendo más en todas las zonas anteriormente mencionadas pero sin olvidar el resto del animal.

Además, en perros de pelo largo, hay que tener mucha higiene, peinar y desenredar a diario los nudos que se pueden formar ya que entre la maraña de pelo, pueden estar ocultas nuestras enemigas “Las Espigas”.