Notar un bulto cuando acariciamos a nuestra mascota es algo muy habitual. Aunque no tiene por qué ser nada grave, hay que descartar que no suponga un peligro para la salud de nuestro gato o perro.

Derrame Pericardico en Perros

En función de la naturaleza de la lesión se distinguen, a grandes rasgos, cuatro tipos:

-Inflamatoria: reacción del sistema inmune ante una lesión no infecciosa. Es el ejemplo de los hematomas.
-Infecciosa: presencia de un agente etiológico infeccioso que supone la activación del sistema inmune del animal con la consiguiente llegada de células inflamatorias tales como neutrófilos, linfocitos, macrófagos...
-Hiperplásica: mayor multiplicación de las células que conforman un tejido. La arquitectura de las células es normal, diferenciándose de esta forma de la neoplasia, pero en ocasiones se considera la hiperplasia como un paso previo a la aparición de una neoplasia.
-Neoplásica: se produce un crecimiento descontrolado de las células de la zona, afectando a la arquitectura típica del tejido. Las neoplasias pueden ser benignas o malignas.

Si detectas cualquier bulto en tu animal de compañía, no dudes en acudir al veterinario para que le realice una exploración exhaustiva. El primer abordaje de este tipo de lesiones suele ser la realización de una citología. Se trata de una técnica sencilla, rápida, no dolorosa para el animal y que normalmente no requiere sedación. Consiste en la punción (con aspiración en algunos casos) de la zona con una aguja, para su posterior extensión en un portaobjetos. A continuación, se procede a la tinción de la muestra para el estudio de la morfología de las células al microscopio.

Aunque es una técnica que presenta ventajas importantes, no deja de estar exenta de limitaciones. Es el caso, por ejemplo, de las masas poco exfoliativas, es decir, aquellas de las que no se puede obtener una gran cantidad de células. En estos casos la muestra puede no ser representativa y, en consecuencia, no permite emitir un diagnóstico. Además, la citología no muestra la arquitectura del tejido ni los márgenes de la lesión y por tanto su grado de invasión. Por esta razón, en muchas ocasiones es necesaria la realización de una biopsia para su estudio histopatológico.